CPR: REGLAMENTO DE PRODUCCIÓN DE LA CONSTRUCCIÓN
El 9 de marzo de 2011 el Parlamento Europeo adoptó el Reglamento de Productos de la Construcción (doc. UE 305/2011), más conocido como CPR. El cual detalla las condiciones para la comercialización de productos de la construcción, estableciendo unos ensayos armonizados a aplicar por igual en todo el marco del mercado de la Unión Europea.
La legislación entró en vigor el año pasado, aunque será de obligado cumplimiento por parte de los fabricantes a partir de julio de 2017, pasando a ser plenamente aplicable en todos los estados miembros de la UE. Se prevé que se vaya aplicando gradualmente en los distintos grados de la comercialización hasta estar normalizado.
¿Cómo afecta el CPR al mundo de las instalaciones?
El reglamento, hace referencia a todo aquel material destinado a incorporarse de forma permanente en las obras de construcción, tanto edificios como ingeniería civil.
En nuestro sector, el principal afectado es el cableado eléctrico, exigiéndose unas prestaciones mínimas en protección contra incendios.
¿Cómo afecta el CPR al cable eléctrico?
La CPR exigirá unas prestaciones mínimas respecto a la reacción al fuego, la resistencia al fuego y la emisión de sustancias peligrosas durante el desmantelamiento y reciclaje de los cables.
Bajo este marco, los fabricantes han debido modificar los compuestos del aislante del cableado para actualizar sus productos a estas nuevas exigencias por tal de superar los ensayos necesarios que demuestren que cada producto garantiza las exigencias del CPR.
¿Qué beneficios aportará?
Se ha unificado el criterio de fabricación a nivel europeo, obligando a todos los fabricantes a pasar unos estrictos requisitos para su comercialización y a obtener un certificado de producto.
Se establece un “lenguaje técnico común” para fabricantes, las autoridades de los Estados y los usuarios (arquitectos, ingenieros, empresas de construcción…) que tengan que elegir el producto más conveniente según el uso en las obras de construcción.
¿Qué cables afectará?
El objetivo del reglamento son todos los cables instalados con carácter permanente en las estructuras en el momento de la construcción.
Afectando a los cables destinados al suministro eléctrico y a las comunicaciones en los edificios y obras de ingeniería civil, sometidos a los criterios de prestaciones para la reacción y la resistencia al fuego.
¿Qué novedades traerá el cable comercializado bajo la CPR?
Los fabricantes deberán justificar una serie de prestaciones bajo la norma armonizada. Deberán establecer una Declaración de prestaciones (DdP) y colocar el marcado CE en la etiqueta del producto.
La DdP es un documento por el cual el fabricante identifica claramente un producto y sus prestaciones para la Reacción al Fuego y por el que asume su responsabilidad, que los fabricantes pondrán a disposición.
¿Qué cambios se avecinan?
Los fabricantes dejarán de comercializar y fabricar cableado sin el marcado CE correspondiente al CPR a partir de julio de 2017.
La distribución deberá acomodarse al reglamento CPR, haciendo uso de la moratoria de la que dispone.
El cableado nuevo incluirá la euroclase (ca) de reacción al fuego en el marcado sobre la cubierta del cable, haciéndolo fácilmente identificable. Distinguiremos 6 clases de rendimiento ignífugo, desde la A a la F, determinando la resistencia al fuego de más a menos.
Además, se identificarán algunos criterios adicionales como la acidez y la caída de gotas o partículas inflamadas durante la combustión.
El CPR supondrá una mejora en la seguridad frente al fuego y garantizará la calidad del cableado a causa de las nuevas normas armonizadas. Pero también tendría que tener un impacto en el sector aumentando flujo de información entre usuarios y fabricantes, normalizando la documentación de los fabricantes que garantizarán sus productos mediante los Ddp de forma equivalente.
Adrià Llobera
30/05/2017